VISITA DE CÉSAR GONZÁLEZ
César González, es un argentino de 28 años, al cual la vida decidió no ponérselo fácil.
Su circunstancia estuvo y estará marcada por el barrio en el que nació, Villa Miseria. El nombre lo dice todo. Me quedé impactada cuando nos contó que una vez él y sus hermanos estaban fuera de Villa Miseria y unos vecinos de otro barrio llamaron a la policía, y esta les llevó de vuelta a casa.
Respecto a su familia, César desde bien pequeño tuvo que hacer de padre y de madre, porque su madre era madre soltera y además se encontraba en la cárcel. Robaba cobre para luego venderlo y así poder alimentar a sus hermanos.
Y a pesar de todo ello, él seguía yendo a la escuela con ilusión y con ganas de aprender. Se esforzaba como el que más y no repitió ningún curso. sin ninguna ayuda.
después de nueve años estudiando, se da cuenta de que estudiando y sacando buenas notas, no hay manera de prosperar en la vida, que de esa manera no va a vivir mejor, y es entonces cuando empieza a delinquir. La vida fácil y la que le da recompensas.
Sin embargo es esta vida, la que lleva a estar seis años en la cárcel, o como dicen en argentina, la tumba.
Allí les trataban como animales, como monstruos y en muchas ocasiones quiso morir.
Pero encontró la salvación gracias a un profesor llamado Patricio, que vio su potencial y confió en él. Le apoyó tanto dentro como fuera de la cárcel.
Gracias a Patricio, César descubrió a Foucault, Freire, Julio Cortázar… autores que le interesaban.
Siguieron sin ponérselo fácil, le quitaron los libros, le prohibieron escribir, el propio psicólogo de la cárcel.
Aún así, César siguió escribiendo y buscó la manera de seguir con su pasión. Llamaba a Patricio y por teléfono le dictaba los poemas.
El sistema penitenciario le hacía la vida imposible a César, pero a pesar de todas las trabas consiguió terminar la escuela secundaria en la cárcel.
Los presos le pedían ayuda para escribir sus cartas y César intercambiaba este trabajo por cajetillas de tabaco, la moneda de cambio en la cárcel.
César al salir de la cárcel consiguió licenciarse en filosofía y actualmente sigue viviendo en la Villa, pero esta fue urbanizada y mejorada.
Pasó el tiempo y comenzó el proyecto de hacer una revista, la cual la empezó vendiendo en la facultad y que actualmente continúa editándose.
César también cortometrajes y largometrajes, y en clase nos enseño uno de sus trabajos.
Después de ver este vídeo, yo me quedé impresionada al ver la pobreza en la villa y contraste con barrios a metros de este.
Es increíble como tras haberle tratado tan la mal la vida, este chico consiguiera dar un giro de 360º y a pesar de todo siguiera adelante y persiguiera su sueño, estando incluso en la cárcel.
Para mí es un gran ejemplo a seguir.
Para terminar os dejo un poema de César González.
ayer hierro hoy niño
ayer me confinaron en el peor infierno
la sociedad cuando te olvida
el hierro habitaba en mi
toda mi esperanza
era morir matando
y hoy suplico a la vida
no negarme su saludo
ayer la psicóloga
se reía de mis planes
hoy no necesito su autorización
para dar el próximo paso
hoy ya no bebo del sol
en pequeños rectángulos
ayer yo era un niño
condenado a ser adulto
hoy soy un adulto
implorando niñez.
Comentarios
Publicar un comentario