EMPECEMOS

«Yo soy yo y mi circunstancia y si no la salvo a ella no me salvo yo»- Ortega y Gasset

Reconozco que, de este cuatrimestre, esta asignatura me llamaba bastante la atención porque su nombre así de primeras no te sugiere mucho.

Dos semanas antes de que empezáramos recibimos un correo con el programa de esta asignatura y al leer bitácora me puse bastante nerviosa. Esta asignatura supone un trabajo constante y me daba miedo saturarme y no dar todo de mí.

La presentación de la asignatura me encantó. En primer lugar, el profesor nos proyectó una serie de preguntas que debíamos ir contestando individualmente en alto a modo de presentación.

Tras haber elegido al azar unas palabras, nos tocó reflexionar sobre ellas.

A mí me tocó la palabra matrimonio, no me supuso mucho esfuerzo reflexionar sobre ella porque creo que esta palabra me viene como anillo al dedo.

En lo personal, matrimonio para mi significa familia, unión y mis abuelos. Mis abuelos dan sentido a la palabra matrimonio, para mí es la perfecta historia de amor.

Y en lo profesional, me encantan las bodas, me he visto todas las películas sobre bodas. Como loca de las bodas me gustaría dedicarme a algo relacionado con ello.

Como tarea para casa nos tocó pensar una palabra que nos identificara. En mi caso fue constancia. Tal y como dije en la redacción que entregamos, si no fuera por la constancia no estaría en primero de Publicidad y Relaciones Públicas.

Si algo me gusta, no me rindo, lucho hasta que lo consigo, cueste lo que cueste. Y si alguna vez no he terminado algo era porque en realidad no me entusiasmaba.

Estando en tercero de la eso, un profesor me dijo que debería de meterme en diversificación porque si no, no iba a sacar la eso y que por su puesto me olvidara de estudiar bachillerato y una carrera. Si le hubiera hecho caso y no hubiera sido constante no estaría estudiando una carrera que me encanta.

Para concluir este primer post, repito lo que dijo el profesor y que comparto totalmente: todo pasa por algo.